Internacional. La Directiva europea sobre climatización móvil (MAC) entró en vigor en 2006. Establece una prohibición gradual de los gases de efecto invernadero en vehículos de turismo e industrial ligero. Desde el 1 de enero de 2011, los sistemas de aire acondicionado de los vehículos nuevos deben llenarse con un refrigerante con un GWP inferior. El R134a ha sido totalmente prohibido desde enero de 2017. Todos los coches deben estar equipados con un sistema con un GWP por debajo de 150.
En este contexto, el uso del refrigerante de bajo GWP R1234yf está en el centro del debate.
En Alemania, el fabricante de automóviles Daimler retrasó la introducción de R1234yf en sus vehículos, bajo el argumento de que es ligeramente inflamable. Daimler trató de desarrollar un refrigerante de aire acondicionado basado en CO2 en su lugar. Además, el fabricante japonés Sanden confirmó recientemente que está suministrando compresores de CO2 para Daimler.
En 2015, la Comisión Europea remitió a Alemania ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea alegando que Alemania había infringido la legislación de la UE al permitir que el fabricante de automóviles Daimler pusiera vehículos de automóviles todavía utilizando R134a en el mercado, cuando se aprobó el uso del gas alternativo R1234yf. Este caso aún no ha sido oído en los tribunales. La Federal Motor Transport Authority de Alemania recientemente tomó medidas, sin embargo, emitiendo un retiro de todos los coches construidos por Daimler que estaban equipados con R134a cuando se suponía que estaban equipados con R1234yf. Esto podría representar 134.000 vehículos Mercedes.
El refrigerante R1234yf también es la razón de una larga disputa entre el fabricante francés Arkema y el fabricante estadounidense Honeywell. Arkema ha presentado su caso a la Comisión Europea varias veces desde 2011, ya que las patentes de Honeywell y DuPont sobre R1234yf impiden a Arkema comercializar su propio producto, incluso si poseían tecnología propia para fabricarlo. Arkema presentó una nueva queja en junio de 2017, diciendo que está convencido de la necesidad de nuevos argumentos para que las CE persigan un caso de abuso de posición dominante.
Fuente: International Institute of Refrigeration.