La importancia de las certificaciones radica en ofrecerle al cliente una alternativa confiable y que cumple con las características mencionadas en las tablas.
Por Alfredo Sotolongo*
¡La energía más económica de producir es la que se ahorra!
Para que los equipos y componentes de los distintos sistemas de aire acondicionado verdaderamente ahorren energía de la forma que esperamos, deben reflejar en su operación lo mismo que muestran en su literatura técnica. ¿Cómo nos aseguramos de esto? Deben de estar certificados por una o varias de las instituciones que inspeccionan y confirman que lo que publican los fabricantes es real. Entre algunas de las instituciones que certifican nuestros equipos se encuentran las siguientes:
CTI – Cooling Technologies Institute. Antes conocido como Cooling Towers Institute. Hacen pruebas técnicas a nuestras torres de enfriamiento Protec para comprobar que las características que publicamos son correctas y así certificarlas.
AHRI – Air-Conditioning, Heating, Refrigeration Institute. Visitan las fábricas de nuestras representadas, como AAON y al azar piden cualquier equipo de la línea de producción para hacerle las pruebas y poder certificar sus tablas.
AMCA – Air Movement and Controls Association. Los fabricantes de ventiladores serios y responsables, como lo es Loren Cook, les facilitan a esta institución su línea completa de los ventiladores que fabrican para que les hagan las pruebas pertinentes y al satisfacer dichas pruebas, certifican sus tablas.
Estas instituciones, al certificar las capacidades presentadas por los fabricantes, le brindan la paz mental al que selecciona estos equipos para estar seguro que va a lograr el ahorro energético que busca en sus diseños. Según informan algunos colegas que me han tratado este tema, en el caso de torres de enfriamiento y de equipos de aire acondicionado, la mayoría de los fabricantes están certificados tanto por CTI como por AHRI. Pero en el caso de los ventiladores, uno de los principales problemas que tienen es que hay varios fabricantes que no tienen certificación AMCA o que solo tienen algunos modelos certificados.
Los usuarios o propietarios de los proyectos, en muchos casos, desconocen la existencia de AMCA y la protección que brinda. Los fabricantes sin certificación proponen ventiladores más económicos que no están certificados por AMCA. Muchos de estos ventiladores no cumplen con la capacidad que aparece en las tablas técnicas en la literatura que estos fabricantes publican. El problema serio reside en que solamente después de estar instalados y en operación, cuando ya es muy tarde, es que se hace evidente que dichos ventiladores no cumplen con la capacidad para que fueron seleccionados.
En el caso de los ventiladores les quisiera brindar una pequeña reseña de la historia de AMCA la cual se fundó hace 100 años en 1917 donde todos los fabricantes se unieron para a través de una institución independiente, garantizar la integridad de los sistemas de ventilación en aplicaciones industriales, comerciales y residenciales. Una de las responsabilidades más importantes de AMCA ha sido comprobar el rendimiento no solo de ventiladores, pero de compuertas, persianas, etc., componentes que manejen aire.
Las tablas técnicas del caudal de aire y las caídas de presión de los ventiladores que AMCA certifica garantizan a los ingenieros consultores, arquitectos, contratistas y propietarios que realmente la operación del sistema de ventilación está de acuerdo con el diseño. Además, en aplicaciones donde el consumo de energía y los niveles de sonido son críticos, comprueban que los valores publicados por el fabricante son los reales.
En lo que respecta a mi gran pasión, ahorro de energía, me pregunto: ¿cuál sería el impacto al medio ambiente y económico cuando un ventilador no certificado opera fuera de los valores publicados por ese fabricante? Para contestar esta pregunta, AMCA ha desarrollado el programa que estima la energía que desperdicia el ventilador. Para usar esta herramienta, el usuario selecciona el país donde el ventilador va a operar, lo que automáticamente incluye la moneda del país y el promedio del costo de la energía eléctrica.
Este programa permite determinar el costo de la ineficiencia de un ventilador que no está certificado. Los miembros de AMCA pueden usar estos resultados para comparar sus ventiladores certificados con los de los fabricantes que no lo están, lo cual justifica el que sean miembros y el costo de certificar sus equipos.
Además, los ingenieros consultores, contratistas y propietarios deben considerar especificar los fabricantes que están certificados por AMCA y asegurarse que los ventiladores que se instalan cuentan con dicha certificación. Esta es la única seguridad que tendrán de que la operación del sistema de ventilación estará de acuerdo con el diseño y que cumpla con las necesidades del propietario.
Todos los fabricantes serios y responsables, como lo es Loren Cook, cuentan con certificación AMCA lo cual garantiza que su producto opera de acuerdo a las tablas técnicas que ellos publican. Sugiero a nuestros colegas que se aseguren de diseñar sus sistemas de ventilación utilizando fabricantes que tengan su línea certificada y que aparezca el logo de AMCA tanto en las tablas técnicas como en el equipo.
Si necesitan más información de cualquiera de los temas tratados en esta columna, favor de comunicarse conmigo al correo: [email protected]
* Presidente de Protec, Inc., está certificado como ingeniero profesional en Puerto Rico y en el estado de la Florida; tiene más de 40 años de experiencia en la aplicación y venta de sistemas y equipos para la conservación de energía. Es miembro de ASME (American Society of Mechanical Engineers), AEE (Association of Energy Engineers), ASHRAE y fue presidente del capítulo Miami de dicha asociación.