Internacional. Durante el evento ATMOsphere America en Chicago realizado en junio de 2016, René Desjardins, de Medio Ambiente de Canadá, dijo que su país está en el proceso de elaboración de nuevas medidas reguladoras para reducir el consumo de HFC a través de una combinación de disminución gradual y controles específicos del producto.
Las disposiciones sobre la reducción gradual se aplicarían a las empresas que importan a granel HFC. Cuatro sectores están en el objetivo: refrigeración y aire acondicionado, aire acondicionado de vehículos, productos de espuma y en aerosol.
De acuerdo con el reglamento propuesto, los controles específicos del producto prohibirían la importación y fabricación de productos o sistemas que contienen HFC.
La propuesta de nuevo reglamento prohibiría el uso de los HFC en ciertos sectores de la refrigeración y de aire acondicionado por un año específico, similar al enfoque adoptado por el Reglamento de gases fluorados de la UE y la estrategia propuesta por California.
Sin embargo, establece límites más altos de GWP para la mayoría de las aplicaciones. Por ejemplo, en la refrigeración centralizada y refrigeración de baja baja temperatura independiente, establece un límite de 1.500 para 2020.
Los interesados aún tienen la oportunidad de hacer comentarios sobre la regulación propuesta por Canadá, dijo Desjardins.
Por su parte, Agustín Sánchez, de la Unidad de Protección del Ozono de México, presentó la estrategia de eliminación gradual de HFC del país, con el argumento de que la mejor manera de eliminar los HFC es controlar su producción y consumo.
México aprobó una Ley de Cambio Climático general en 2012, que establece los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero un 30% en 2020 y en un 50% para el año 2050, tomando el año 2000 como la línea de base.
"Los principales obstáculos a la eliminación de los HFC son la falta de disponibilidad de alternativas, la falta de capacidad en el sector de los servicios, la falta de fondos, y la resistencia al cambio", dijo Sánchez.