En los proyectos de climatización y aire acondicionado se debe tener presente este aspecto, pues hace parte fundamental del desarrollo y finalización óptima de una instalación.
por Camilo Botero*
Estimados lectores: por sugerencia del Editor de la revista, trataré de escribir esta columna sobre el tema de la Seguridad Industrial; sobre el cual no soy un experto, pero sí he tenido innumerables vivencias relacionadas con este tópico que traeré a colación, para darle un enfoque con matices de experiencia práctica.
Alrededor de 1967, terminando mi carrera de ingeniería mecánica en la UN de Colombia, tomé el curso que era del pensum sobre Seguridad Industrial, dictado por un especialista en esta disciplina que era en su momento Director del Consejo Colombiano de Seguridad Industrial, quien presentó el curso de una manera muy didáctica, documentándolo con imágenes impresionantes de accidentes laborales; recuerdo muy vívidamente una foto que presentaba un dedo desgarrado con una argolla matrimonial, indicando con ello, que cuando hay equipo en movimiento no debe llevarse nada que pueda producir ese tipo de accidentes.
A lo largo de mi vida profesional siempre he tenido que ver con el tema de Seguridad Industrial, recuerdo que cuando inicié como ingeniero jefe de montajes en Carvajal S.A en 1974., en esa época el concepto de seguridad en el trabajo no era tan exigente, aun cuando ya existía legislación al respecto, pues la “seguridad” significaba más bien, seguridad en la planta contra robos y mal comportamiento. Tuve que presenciar varios accidentes graves, pero afortunadamente había una oficina médica en la planta que atendía inmediatamente a los accidentados y luego se remitían al Instituto Colombiano de los Seguros Sociales: ICSS.
El ISS (como se llamó luego) manejaba los riesgos de invalidez y muerte sin mucha distinción de las enfermedades comunes, y sin ninguna presión para que los empresarios desarrollaran programas de prevención y capacitación en el tema de Seguridad Industrial, propiamente dicha. Ese enfoque de la Seguridad Industrial se mantuvo en Colombia durante 30 años aproximadamente de 1950 a 1980. La ley 9 de 1974 (justo cuando entré a Carvajal S.A.) estableció que: “la salud de los trabajadores es una condición indispensable para el desarrollo socioeconómico del país” y el Ministerio del Trabajo expidió el Estatuto de Seguridad Industrial.
El año 1979 fue trascendental para la Seguridad Industrial en el país, ya que se dictaron obligaciones mucho más concretas para los industriales y se les asignó a los Ministerios del Trabajo y de Salud, tareas de vigilancia e inspección, las cuales condujeron a los industriales a instalar sus departamentos de seguridad industrial, con funciones claramente definidas y con estricto cumplimiento de las normas.
La Ley 100 de 1993 marcó un hito en el modelo de la Seguridad Social y por ende en el tema de la Seguridad Industrial. Esto dio origen a las Administradoras de Riesgos Profesionales ARP, conocida hoy como ARL (L por laborales), de carácter privado, que se dedicarían exclusivamente a prestar atención en todos los aspectos a los trabajadores que hayan sufrido un accidente.
Un año después el gobierno creó el Sistema General de Riesgos Profesionales, un conjunto de entidades públicas y privadas, normas y procedimientos, destinados a prevenir, proteger y atender a los trabajadores de los efectos de las enfermedades y los accidentes que puedan ocurrirles con ocasión o como consecuencias del trabajo que desarrollen.
Posteriormente se adoptó el Sistema General de Riesgos, con la metodología del Aseguramiento de la Calidad con las normas ISO 9000, en el año 2012 dio origen al sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo SG-SST (Ing. Renán Rojas Gutierrez, actual presidente ejecutivo del CCS).
Este sistema aun cuando es bien intencionado, se ha manifestado como una carga financiera bastante significativa para las empresas Pymes u otras con problemas de liquidez y/o cambio tecnológico, pero considero que es conveniente persistir en ese enfoque de mayor exigencia a las empresas. En América Latina, según la Organización Internacional del Trabajo OIT, se registran 11.1 accidentes mortales por cada 100.000 trabajadores en la industria. Y en Colombia, según la Federación de Aseguradores Colombianos, Fasecolda, se presentan más de medio millón de accidentes de trabajo, lo cual es demasiado alto.
Prevención de accidentes en proyectos y mantenimiento de HVAC/R
Como contratista y aun ahora como Ingeniero Consultor, cada que voy a una empresa industrial, debido a las regulaciones vigentes; debo tomar un curso de Seguridad Industrial bastante detallado, y en algunas fábricas hay que responder a un cuestionario; siempre entregan un manual de comportamiento de seguridad industrial y procedimientos de evacuación en caso de siniestros.
Equipo de seguridad
Estas compañías son muy rigurosas en lo que respecta a los equipos de seguridad que debe tener un visitante a su planta:
- Casco de seguridad. En algunos casos con barboquejo.
- Botas de seguridad con puntera metálica.
- Gafas de seguridad.
- Protección auditiva.
- Certificado de Trabajo en Altura
Este es un certificado exigido desde el 2014, que me parece muy bien, pues mucho de los accidentes que me tocó presenciar se dieron por falta de procedimientos y equipos adecuados para trabajar en alturas superiores a 1.5 metros. El SENA en Colombia otorga este certificado así como otras entidades técnicas o universitarias, aprobadas por el Ministerio de Educación.
Permiso para trabajo en caliente
Es una autorización y aprobación por escrito, que especifica la ubicación y el tipo de trabajo que se llevará a cabo. En este se certifica que los peligros han sido evaluados por el Departamento de Seguridad Industrial de la planta y se han tomado las medidas de protección necesarias, por ejemplo la presencia de un miembro de la Brigada de Bomberos, si hay llamas abiertas.
Incluye permisos para realizar soldaduras
El personal que realice soldaduras en los sistemas de refrigeración debe tener la formación requerida para ello en cuanto a calidad y seguridad.
La Sociedad Americana de Soldadura (AWS), da capacitaciones y certificaciones para esta disciplina.
Permiso de trabajo en espacios confinados
Es también una autorización y aprobación por escrito, que especifica la ubicación y el tipo de trabajo que se llevará a cabo; el cual debe hacerse siempre, como mínimo en parejas. En este se certifica que los peligros han sido evaluados, por ejemplo si hay atmósferas peligrosas, si hay peligro de asfixia, o riesgo de quedarse encerrados, Esto será revisado por el Departamento de Seguridad Industrial de la planta, para garantizar que han tomado las medidas de protección necesarias.
Para terminar, quienes ejecutamos diseño, montaje y mantenimiento de proyectos de Climatización y Refrigeración que representen peligro de muerte o riesgos de accidentes, por ejemplo manejo de refrigerantes que impliquen riesgos de incendio o de toxicidad; debemos estar muy consientes de esos peligros y por lo tanto diseñar, montar y mantener teniendo en cuenta todos los posibles riesgos, pensando siempre en la seguridad de todos.
En ese caso el Ingeniero diseñador, el contratista o el personal de mantenimiento, deberán estar en la capacidad de asesorar a sus ingenieros, técnicos y demás personal involucrado en todo lo concerniente a la Seguridad Industrial, para llegar a ¡Cero accidentes!!!
* Camilo Botero es el actual Secretario de la Federación de Asociaciones Iberoamericanas del Aire Acondicionado y la Refrigeración - FAIAR; fue presidente de ACAIRE y es presidente de Camilo Botero Ingenieros Consultores Ltda. Se ha desempeñado como docente en varias universidades colombianas, gremios y actualmente en ACAIRE en cursos de diplomado de proyectos de aire acondicionado, eficiencia energética en aire acondicionado y refrigeración, cogeneración y trigeneración, psicometría aplicada, termodinámica, mecánica de fluídos, transferencia de calor y turbomaquinaria. ([email protected]).