En la radio suena una canción pop: ”The heat is on. The heat is on. Oh-wo-ho, oh-wo-ho… (La cosa está que arde. La cosa está que arde. [...])“. Y, realmente, en la calle el sol es abrasador. Pero aquí, en la entrada de la empresa Hans Börner, la temperatura es agradable. “No siempre fue así“, explica Armin W. Schulze, responsable de compras en Hans Börner GmbH & Co.KG. Esta empresa es uno de los mayores fabricantes alemanes de claraboyas de PLEXIGLAS®. “Cuando las claraboyas de nuestra oficina estaban fabricadas en acrílico convencional, durante los días que apretaba el sol aquí apenas podía aguantarse el calor”, recuerda Schulze. Por esta razón, este año se han sustituido las 15 claraboyas del edificio por otras fabricadas en PLEXIGLAS HEATSTOP®. Este material especial refleja el calor del sol, reduciendo considerablemente la radiación térmica. “Las recepcionistas son las que más han agradecido el cambio. Y es que, pese al aire acondicionado, las grandes claraboyas del vestíbulo transmitían demasiado calor“, explica Schulze.
La renovación de las claraboyas no sólo resulta ventajosa para los empleados, sino que también la propia empresa ha conseguido ahorrar costes de electricidad generados por la climatización. “Antes, a menudo el aire acondicionado funcionaba a la máxima potencia y, aun así, no resultaba suficiente en los días especialmente calurosos. Ahora, gracias a PLEXIGLAS HEATSTOP®, nuestra necesidad de climatización se ha reducido considerablemente, lo cual también se refleja en la factura de la electricidad“, explica Schulze. Este aspecto será aún más importante en el futuro. Y es que, según los resultados de numerosos estudios, los precios de la energía van a continuar aumentando. “Nuestras experiencias pasadas con PLEXIGLAS HEATSTOP® han sido positivas. Desde hace algunos años contamos en nuestra oficina con una bóveda de cañón fabricada en este material, y estamos muy satisfechos con ella. Debido al aumento de los precios de la electricidad, también nos pareció adecuado cambiar las claraboyas“, explica Schulze. Otra ventaja: puesto que PLEXIGLAS HEATSTOP® dispersa muy bien la luz, nuestras oficinas no requieren luz artificial adicional, lo que nos permite prescindir de la fuente calorífica de luz artificial y, en consecuencia, del correspondiente consumo de electricidad. De esta forma, la protección efectiva contra el calor reduce los costes a largo plazo. Al mismo tiempo, el menor consumo de energía reduce las emisiones de CO2: una importante contribución a la protección del medio ambiente que también beneficia a la empresa.
PLEXIGLAS HEATSTOP® refleja el 68% de la energía solar. Frente a esta efectiva reflexión de infrarrojos, el cristal acrílico convencional sólo alcanza un grado de reflexión del 36%. En comparación con las claraboyas convencionales, las estancias en las que se aplica PLEXIGLAS HEATSTOP® se calientan aproximadamente un 50% menos, según una investigación realizada por el Departamento de Tecnología de Alumbrado y Tecnología de la Construcción de la Fachhochschule Köln (Escuela Politécnica Superior de Colonia).
PLEXIGLAS HEATSTOP® puede incorporarse sin grandes esfuerzos no sólo en las nuevas edificaciones, sino también en las ya existentes. Un factor que también tienen en cuenta los clientes particulares, a los que la empresa Hans Börner ya ha vendido aproximadamente 500 claraboyas PLEXIGLAS HEATSTOP®. “Se muestran especialmente impresionados aquellos clientes que cambian las claraboyas incoloras de cubierta doble fabricadas en acrílico convencional de sus tejados por PLEXIGLAS HEATSTOP® de aspecto lechoso-ópalo y triple cubierta. La diferencia de la temperatura ambiente es realmente inmensa“, explica Schulze. Los especialistas de Hans Börner fabrican las nuevas claraboyas perfectamente adaptadas a cualquier solución constructiva. Para ello, las planchas de PLEXIGLAS® rectas se termoconforman. “Calentamos las planchas hasta que han adquirido una consistencia parecida a la de una toalla húmeda”, explica Schulze. Después se define el contorno del marco exterior, que varía desde circular a ovalado y poligonal. Finalmente se define el punto alto, también denominado flecha o cenit. Después, la plancha en estado blando se sopla con aire comprimido hasta obtener la forma deseada. Los agujeros destinados al atornillado se perforan de forma que se adapten al marco de fijación existente.
Según Schulze, en el sector industrial PLEXIGLAS HEATSTOP® se demanda sobre todo en naves industriales y de montaje. Pero también constituye una solución interesante para edificios de oficinas. Schulze cuenta con un incremento de la demanda futura de PLEXIGLAS HEATSTOP® en oficinas debido al aumento de los precios de la energía y al Energiepass o pasaporte energético (certificado que documenta el consumo energético del edificio) previsto en Alemania para edificios. “El ahorro de energía adquiere cada vez mayor importancia. Por esta razón, los arquitectos deberán conceder más valor aún al tema de la eficiencia energética en las construcciones. Si un arquitecto se dirige a nosotros ya durante la fase de planificación de una obra, a la hora de adaptar el concepto de protección contra el calor conseguirá ahorrar mucho dinero, puesto que ello nos permite recomendar las medidas estandarizadas más rentables en cada caso”, explica Schulze. Schulze también espera un aumento de la demanda en el mercado de los clientes particulares tan pronto como el pasaporte energético se haga obligatorio tal y como ha planeado la UE: “Cuando hace un par de años entró en vigor una nueva directiva sobre el aislamiento térmico de los tejados, las cifras de compra de claraboyas de tres y cuatro cubiertas aumentaron repentinamente. Lo que ocurrió entonces en el ámbito del aislamiento térmico podría repetirse con el tema de la protección contra el calor“, predice Schulze. "