
Por eso definir una arquitectura común del sistema utilizando métodos estándar y abiertos es importante y más apropiado. Una buena especificación del sistema de automatización definirá los requerimientos para cada uno de los aspectos de éste. Así que, cuando se define una especificación abierta, existen cinco elementos que necesitan ser definidos:
La infraestructura: incluyendo el protocolo, los enrutadores, el tipo de medios, la conectividad IT, etc. Todos estos deben ser especificados con base en estándares abiertos, no sobre un producto específico.
Los dispositivos: se trata de los controladores en la red que producen, consumen o manipulan datos y controlan/monitorean el sistema. En una arquitectura abierta, es posible utilizar dispositivos de diferentes proveedores, ya que todos ellos se ajustan a una norma industrial uniforme como lo es LON.
Las herramientas: de manejo de software y de red que configuran, comisionan y mantienen el sistema. Las herramientas necesitan estar en capacidad de coexistir.
Interfaces de usuario gráficas: Normalmente existen instrumentos de visualización que el usuario o manejador de controles utiliza para obtener una visión del sistema. Además, ofrece la misma visión y sensación para monitorear y controlar, sin importar cuál sistema o subsistema está visualizando un operador. Como resultado de ello, los operadores de sistemas necesitan solamente poder manejar bien una interfaz de usuario.
Conectividad empresarial: Es el método para conectar la red de control del edificio a la red de datos (conocido como arquitectura LON-LAN-WAN). Esto asegura que el sistema de control se convierta en un elemento de todas las fuentes de datos disponibles para la empresa.