Presentamos una serie de maneras de combatir los diferentes inconvenientes que genera el aire caliente.
por Lennox
A medida que el clima frío se desplaza hacia el interior, los niveles de humedad disminuyen de forma natural. Esto ocurre porque el aire frío no puede retener tanta humedad como el aire tibio. El nivel ideal de humedad interior durante el invierno debe estar alrededor del 45 por ciento. Pero el aire seco del invierno puede causar una reducción sustancial de la humedad a niveles del 15 por ciento o menos. Este desequilibrio de la humedad puede acarrear una serie de problemas que pueden afectar su salud, su hogar y sobre todo su comodidad.
Problema 1: El aire caliente y la prevención de enfermedades
La parte superior de su sistema respiratorio, incluyendo la garganta y la nariz, está revestida de membranas húmedas. Estas membranas sirven para atrapar la suciedad, el polvo, los virus y las bacterias antes de que lleguen a sus pulmones. Cuando estas membranas pierden demasiada humedad debido al aire seco, su capacidad para capturar partículas se ve comprometida.
Unos niveles adecuados de humedad ayudan a estas membranas a hacer su trabajo, evitando que partículas nocivas ingresen a las áreas delicadas de sus pulmones. Así que si usted toma medidas para mantener la cantidad correcta de humedad en su aire acondicionado, puede reducir el riesgo de sufrir enfermedades.
Problema 2: El aire caliente no es bueno para la nariz
En algunas personas el aire demasiado seco puede causar otro síntoma incómodo y desagradable: picazón e incomodidad en los conductos nasales. Debido a que la mayor parte de la respiración se realiza a través de la nariz, unos niveles bajos de humedad pueden causar sequedad e irritación en el interior de la nariz. Esto no sólo es doloroso, sino que puede causar hemorragias nasales. Sin embargo, el aire adecuadamente humidificado mantiene los conductos nasales sanos y cómodos con cada respiración.
Problema 3: Un nivel bajo de humedad resiente la piel
Más de la mitad de la piel está compuesta por agua. Por lo tanto, cuando el aire carece de humedad, la piel comienza a secarse. Esto puede causar picazón, descamación y tensión alrededor de las articulaciones. También puede causar un doloroso agrietamiento de la piel y de los labios. El aire demasiado seco también puede causar brotes de los problemas de piel existentes, entre otros, el eczema y el acné. Sin embargo, el aire humidificado puede ayudar a que la piel se mantenga en buen estado durante todo el invierno, incluso el más inclemente.
Problema 4: Electricidad estática
Cuando el aire tiene un nivel adecuado de humedad, la electricidad estática de su residencia se disipa de forma natural. No obstante, cuando el aire está demasiado seco, dicha electricidad comienza a acumularse. Esto puede hacer que las mantas y la ropa se peguen. Y puede causar pequeñas descargas eléctricas dolorosas cada vez que toque el pomo de la puerta u otra superficie metálica.
Cuando el aire contiene suficiente humedad, la electricidad se disipa antes de que pueda acumularse. Gracias a ello, los ocupantes no sienten las descargas eléctricas, y no hay ningún problema al tender la cama o doblar la ropa.
Problema 5: Daños en su residencia
El aire seco intenta absorber la humedad dondequiera que pueda encontrarla. Esto significa que durante un invierno frío el aire seco puede comenzar a extraer la humedad de la estructura de su casa. A medida que su casa se seca, notará que los suelos, en particular los pisos de madera, comenzarán a crujir más.
El aire seco también puede extraer humedad de la madera del armazón de su casa, causando alteraciones en las paredes y las jambas de las puertas. Esto puede hacer que las puertas sean difíciles de abrir y cerrar, y generar espacios entre los techos y las paredes. Estos espacios también pueden formarse en ventanas hechas completamente en madera. Esto permite el ingreso del aire frío del invierno, aumentando así el costo de la cuenta de calefacción.
Problema 6: Daños a su mobiliario
A medida que el aire de su casa se hace más seco, puede comenzar a dañar no sólo la estructura de la edificación, sino las cosas que hay en su interior. Los muebles de madera pueden empezar a doblarse e incluso agrietarse. Los instrumentos musicales pueden perder su forma y su afinación. Incluso artículos de papel como libros y obras de arte pueden volverse frágiles, deformarse y arrugarse.
Cómo combatir el aire caliente
Si desea evitar el suplicio, la incomodidad y los daños que ocasiona el aire seco, existen dos tipos de humidificadores para toda la casa disponibles en el mercado. Cada uno de ellos ayudará a mitigar los problemas causados por el aire seco. Y a diferencia de los humidificadores portátiles, que sólo restauran la humedad en una habitación, los humidificadores para toda la casa ayudan a preservar la comodidad y el aire más saludable en cada una de las habitaciones.
Humidificadores de derivación
Un humidificador de derivación es aquel que usa el flujo de aire generado por su sistema de calefacción o climatizador de aire para llevar humedad a toda la casa. Los humidificadores de derivación normalmente se instalan fuera de la vista, en el sótano o en el ático, y requieren muy poco mantenimiento.
Por ejemplo, el humidificador de derivación Lennox HCWB17 puede agregar hasta 17 galones de humedad al aire que fluye a través de los conductos diariamente. También cuenta con controles de humedad automáticos opcionales que regulan el agua que se añade al aire, en función de las configuraciones que usted realice. Así, usted puede especificar la humedad interior que prefiera para alcanzar el nivel exacto de comodidad que desee.
Humidificadores con ventilador incorporado
A diferencia de los humidificadores de derivación, que requieren un calentador o climatizador para hacer circular la humedad, un humidificador con ventilador incorporado emplea su propio ventilador eléctrico para distribuir aire húmedo en toda la casa. El Lennox HCWP18 es un humidificador de este tipo, que puede agregar hasta 18 galones de humedad al aire que circula diariamente por su casa.
Debido a que utiliza su propio ventilador de gran potencia, puede humedecer el aire incluso cuando su sistema de calefacción y aire acondicionado no está funcionando. Y debido a su gran capacidad, es ideal para casas más grandes que necesitan mayor circulación de humedad.
No sufra durante el invierno.
El frío hace que el invierno ya sea, de por sí, bastante malo. No permita que el aire seco se sume a su malestar. Ni permita que dañe su casa ni sus enseres. Tome el control con un humidificador y disfrute de un aire cómodo y saludable durante todo el año.